Clave. Tribuna Marxista (México, 1938-1940)

Bárbara Funes

En el preludio de la Segunda Guerra Mundial, durante su último exilio, en México, León Trotsky y sus colaboradores lanzan la revista Clave. Tribuna Marxista, para el mundo de habla hispana, en 1938.
Apenas un año antes, Trotsky, uno de los principales dirigentes de la Revolución Rusa, había obtenido asilo en esta tierra, escenario de la primera revolución latinoamericana del siglo XX, liderada por Francisco Villa y Emiliano Zapata. El revolucionario sin fronteras, patriota de su época, perseguido por Stalin y sus secuaces, odiado y temido por los principales hombres de la burguesía internacional, obtuvo asilo en México, gracias a las gestiones realizadas por el dirigente trotskista Octavio Fernández Vilchis y Diego Rivera, el afamado muralista, ante el gobierno de Lázaro Cárdenas.
Primero en la casa azul de Frida Kahlo y luego en la casa de la calle Viena, donde ahora se encuentra la Casa Museo León Trotsky, surge la imagen del exiliado, sobreponiéndose a la persecución y a la muerte de sus hijos, uno a uno, trabajando incansable junto a sus colaboradoras y colaboradores. Sobrecogido en su corazón ante la brutalidad de la Segunda Guerra Mundial, y al mismo tiempo, con entereza para analizar desde una óptica marxista esa terrible carnicería, y con el afán de construir una vía hacia la revolución socialista en esos tiempos turbulentos, con una fe inquebrantable en la potencialidad revolucionaria de la clase trabajadora internacional y su capacidad para agrupar alrededor de sí a todos los sectores oprimidos en el mundo capitalista. Acaso levanta su mirada de repente y sonríe un momento cuando un rayo de sol hace resplandecer un árbol en el jardín o cuando se detiene a escuchar el trinar de los pájaros. Y vuelve a concentrarse. Cada minuto de vida es una oportunidad para cambiar de raíz todo. Ese fue parte del escenario donde surgió y floreció la revista Clave.
El contexto de esta publicación fue una situación internacional impetuosa, signada por las tensiones previas a la Segunda Guerra Mundial, de la cual la Guerra Civil española fue un antecedente importante. Al calor de un agitado ritmo de trabajo, intercambios, diálogos, estudio y reflexiones, Trotsky desarrolló importantes elaboraciones para presentar una alternativa revolucionaria a los Frentes Populares1 -cuyo objetivo era la conciliación entre la burguesía y la clase trabajadora-, a la guerra mundial que se avecinaba, desarrolló lecciones de la derrota de la Revolución Española y mientras preparaba la defensa contra los Juicios de Moscú2, León Trotsky fundó Clave. Tribuna Marxista, junto a algunos de sus colaboradores.
Entre estos se contaron Octavio Fernández, Manuel Fernández Grandizo (Munis), Diego Rivera, Jean van Heijenoort, José Ferrel, Adolfo Zamora, Rodrigo García Treviño, Charles Curtiss, George Novack, Juan Luis Velázquez, Liborio Justo, Mateo Fossa, Francisco Zamora, Enrique Espinoza, J. Enrique Blanco Corpeño, Sherman Stanley y Oscar Fisher.
Las condiciones en las cuales se llevó a cabo el proyecto de la revista fueron muy complejas. Fue tanto por el creciente aislamiento de las organizaciones europeas de la IV Internacional, debido al avance del conflicto bélico internacional, así como por la persecución de la que era objeto Trotsky por parte de Stalin y los partidos comunistas de la época.
Trotsky debió enfrentar las provocaciones del estalinismo mexicano, que no sólo desarrolló una gran campaña de desprestigio contra él para evitar que el gobierno de Cárdenas accediera a darle asilo, sino que también aprovechaba cada oportunidad para montar provocaciones y “denunciar” que violaba las condiciones del asilo, así como llevó adelante dos atentados, de los cuales el último culminó en su asesinato.3
Asimismo, cuando Cárdenas le concedió a Trotsky la visa para entrar a México fue bajo las condiciones del artículo 33 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que rezaba “Los extranjeros no podrán inmiscuirse de ninguna manera en los asuntos políticos del país”. Trotsky aceptó y, según Isaac Deutscher (1971), uno de sus principales biógrafos, en su obra El profeta desarmado, mantuvo su compromiso “[y] nunca aventuró opinión alguna sobre la política mexicana [...]”.
No obstante, desde las páginas de Clave León Trotsky pudo expresar su punto de vista ante la tensa situación mundial, y a través de la pluma de sus colaboradores se expresaron numerosas posturas que sobre la política nacional y los fenómenos latinoamericanos tenía la IV Internacional, de acuerdo con los lineamientos teórico-políticos del marxismo revolucionario.

Descripción general

La periodicidad de la revista fue mensual. Se publicó en dos épocas. La primera fue de octubre de 1938 a junio de 1939 y constó de 9 números, con 584 páginas. La segunda fue de septiembre de 1939 a mayo de 1940, con 447 páginas. Es destacable que sus partidarios tuvieron la intención de darle continuidad luego del asesinato de Trotsky: se publicó un número de la tercera época, de 49 páginas, pero el golpe político con su asesinato no se pudo conjurar.
La aparición de Clave. Tribuna marxista fue saludada por The New International4 con estas palabras:

Los dos primeros números de Clave señalan el renacimiento del movimiento marxista en México, tan disperso y desorganizado en los últimos 15 años de decadencia estalinista. Con un formato mejorado a partir del segundo número, la revista ha ganado los elogios de los intelectuales y los trabajadores de la izquierda revolucionaria.

Según palabras de Octavio Fernández:

Podemos decir con absoluta certeza que Clave fue la revista de Trotsky. Ésta nació de él y sirvió a sus intereses fundamentalmente. De principio a fin, la usó para servir a sus ideas y su obra. Fue él quien tuvo la idea de una revista en español para la formación teórica de quienes comenzaron a simpatizar con el trotskismo en América Latina y ésta superó nuestras expectativas. En muy poco tiempo, tuvimos muchas nuevas relaciones políticas a través de Clave, que se convirtió en el centro ideológico y organizativa del movimiento trotskista emergente en América Latina (Gall, 1986).

Fernández, en la entrevista antes citada que llevó a cabo Olivia Gall, dio a conocer que en la fundación de la revista participaron, en primer lugar, Francisco Zamora, quien luego presentó a su hermano Adolfo. Charles Curtiss contribuyó mucho también a organizar la salida de la revista, y en particular a supervisar su impresión, y en cuestiones técnicas fue muy relevante la contribución del profesor Arturo Martínez, responsable de la corrección y de la distribución de la revista (que era nacional e internacional) por un periodo.
Según el testimonio de Adolfo Zamora, Trotsky elaboraba los artículos en ruso, otros colaboradores los traducían al inglés, y Adolfo Zamora los traducía del inglés al español. Fue así que desde las páginas de Clave los redactores dieron a conocer el punto de vista de los impulsores de la IV Internacional, aunque no todos ellos eran integrantes orgánicos de organizaciones trotskistas.
La edición y publicación de esta revista constituyó un aporte inestimable para el establecimiento y desarrollo de grupos trotskistas en América Latina, y para dar a conocer el programa y las elaboraciones de la IV Internacional en el mundo de habla hispana.
Presentó en sus páginas la lectura que hacían los marxistas revolucionarios de la estructura económica, social y política de América Latina en general y de México en particular, como la definición del gobierno de Cárdenas como “bonapartismo sui generis” (Oprinari, 2009), junto con posiciones sobre los prolegómenos de la guerra y la derrota de la Revolución Española, entre otras cuestiones.
Es complejo cuantificar la extensión dedicada a cada tema abordado en esta publicación, ya que los artículos tienen múltiples tópicos. Aún con esta consideración, llevamos a cabo una cuantificación a partir de clasificar los artículos según el tema que predomina en cada uno, y a partir de allí calculamos su extensión en espacios. Presentamos los resultados en cantidad de notas y en porcentaje de extensión.

Primera época: 145 artículos

Tema

% del total

Subtemas

Cantidad de notas

% parcial

México

7.91 %

Revolución mexicana

2

26.20 %

Movimiento obrero

12

64.79 %

Economía

1

8.78 %

Estalinismo

12.5 %

Internacional

9

42.06 %

Estalinismo mexicano y la URSS

14

57.94 %

Revolución española

11.56 %

13

Arte

5.92%

8

Latinoamérica

8.52 %

9

Ante la Segunda Guerra Mundial

18.87 %

Situación internacional

7

49.79 %

URSS

1

3.21 %

Oriente

1

3.52 %

Latinoamérica

9

36.77 %

México

5

6.68 %

IV Internacional

16.81 %

General

20

90.19 %

Latinoamérica

9

9.81 %

Estados Unidos

1 %

4

Francia

3.22 %

3

Oriente

2.96 %

2

Perfiles

0.57 %

2

Teoría marxista

7 %

4

Affaire Rivera

1.54 %

4

Clave

0.83 %

6

Anarquismo

0.795%

2


En la primera época de la revista se publicaron 145 artículos, de los cuales 36 son de León Trotsky, firmados directamente por él, o con seudónimo o sin firma, y 16 fueron escritos por Octavio Fernández Vilchis. De autoría de Trotsky, 23 fueron publicados en los Escritos de León Trotsky (1929-1940), Libro 6, por Editorial Pluma, en la década de 1970, que a su vez se tomaron de los Leon Trotsky’s Writings, de Pathfinder Press, publicados entre 1970 y 1974. Muchos de estos artículos no pudieron ser positivamente identificados como suyos hasta que no se revisaron los archivos depositados en la Biblioteca de la Universidad de Harvard, para las ediciones antes mencionadas.
A su vez, cabe destacar que algunos de estos artículos aparecieron en otras publicaciones trotskistas contemporáneas de Clave, como The New International, Socialista Appeal, Lutte Ouvrière y Biulleten Opozitsi.
En particular “La lección de España: última advertencia” (publicado originalmente en Biulletin Opozitsi, núm. 62-63, febrero de 1938 y en Lutte Ouvrière, 27/1 y 3/2/1938) y “La tragedia española” (publicado originalmente en Biulletin Opozitsi núm. 74, febrero de 1939, y Socialist Appeal, vol. III, núm. 6, 10/2/1939) fueron incluidos en compilaciones de escritos de León Trotsky sobre la Revolución Española.
En septiembre de 1938 se estableció el Buró Panamericano y del Pacífico. Antes de la conferencia de la fundación de la IV Internacional, se realizó una preconferencia del hemisferio oeste. Allí, de acuerdo con Alexander (1973), se votaron varias resoluciones sobre Latinoamérica, incluyendo dos presentadas por Diego Rivera, que fueron luego publicadas en la revista Clave, primera época, en los números 2 y 3: “El desarrollo de Latinoamérica: propuesta para tesis sobre Latinoamérica” y “La lucha de clases y el problema indígena”. Fueron éstas las primeras elaboraciones de la IV Internacional sobre la cuestión indígena y la tierra en Latinoamérica.
Por otra parte, el Programa de Transición, una elaboración fundamental de Trotsky, fue difundido por primera vez en esta revista, en los números 3 y 4, diciembre de 1938 y enero de 1939 respectivamente.
La perspectiva de la Segunda Guerra Mundial, la derrota de la Revolución Española, las elaboraciones sobre Latinoamérica y México y declaraciones e información sobre la IV Internacional estuvieron entre los principales temas de la revista en la primera época.

Segunda época: 67 artículos

Tema

% total

Subtema

Cantidad de notas

% parcial

Segunda Guerra Mundial

19.08 %

Internacional

8

58 %

Oriente

2

2.16 %

Latinoamérica

1

2.32 %

México

4

18.40 %

Clave

1

0.28 %

Pacto germano-soviético

12.12 %

4

URSS

24.40 %

10

IV Internacional

19.79 %

Declaraciones ante la Segunda Guerra Mundial

2

61.16 %

General

5

23.69 %

España

2

8.55 %

México

1

4.65 %

Estados Unidos

1

1.94 %

Filosofía

5.39 %

4

Latinoamérica

1.54 %

3

México

12.30 %

Revolución mexicana

1

10.26 %

Nacional/Movimiento obrero

6

47.30 %

Refugiados españoles

3

11.13 %

Estalinismo

3

31.29 %

Estados Unidos

2.01 %

1

Affaire Rivera

0.46 %

2

Perfiles

1.55 %

1

Clave

0.34 %

1

Asesinato de León Trotsky

0.14 %

1


Son 67 los artículos que conforman la segunda época de Clave. De estos artículos, Trotsky elaboró 12, que representan 33.13 % de la revista en este periodo. Octavio Fernández escribió 8, es decir, 6.88 %, tomando como parámetro la extensión de los textos. Siete artículos fueron publicados por Editorial Pluma en Escritos León Trotsky (1929-1940).
El desarrollo de la Segunda Guerra Mundial puso su impronta en esta segunda época, y en particular la firma del pacto germano-soviético5 provocó una profunda conmoción en la izquierda a nivel internacional. Es así que estos tópicos fueron centrales durante gran parte de esta segunda época de la revista.
A partir de la firma del pacto entre Hitler y Stalin, y de la participación de la Unión Soviética en la Segunda Guerra Mundial, sectores de la IV Internacional comenzaron a poner en cuestión la defensa de las bases sociales del Estado soviético. Se abrió una profunda crisis en el Socialist Workers Party de Estados Unidos. El debate abierto se plasmó en distintos artículos, como “Una vez más sobre el carácter de la URSS”, en el número 3-4 de la revista, y “Fragmentos sobre la dialéctica materialista”, en el número 6 de la revista, y estos textos fueron la base del libro En defensa del marxismo, publicado por primera vez tras el asesinato de Trotsky, en 1941 por SWP estadounidense.

El papel de la revista Clave en Latinoamérica

Clave constituyó un intento, en gran medida exitoso, para superar el aislamiento político de Latinoamérica a partir del desarrollo de las secciones de la IV en el subcontinente. Esta publicación fue concebida por Trotsky y sus seguidores como una herramienta teórico-política del internacionalismo revolucionario.
Pierre Broué, gran historiador del movimiento trotskista, en su artículo “Le mouvement trotskyste en Amerique Latine” escribió:

Simplemente tengamos en cuenta que se trataba de romper un aislamiento político peligroso del continente latinoamericano, al menos hasta el momento de preparar las condiciones para la reconstrucción de una sección en México, Trotsky impulsará la publicación de Clave (1982).

El largo brazo de Stalin se extendió desde Moscú hacia todo el mundo a través de la GPU (Servicio de inteligencia y policía secreta de la URSS). Dirigentes y militantes de la IV Internacional fueron asesinados –como León Sedov, hijo de León Trotsky y Natalia Sedova, y Rudolf Klement, uno de los principales organizadores de la conferencia de fundación de 1938– perseguidos, encarcelados y enjuiciados en la URSS, Europa, China, Ceylán, India y hasta EE. UU. La dirección de la IV Internacional se cambió de París a Nueva York. Antes del conflicto mundial, ya era difícil mantener la comunicación entre las distintas secciones nacionales. Luego del inicio de la Segunda Guerra, se incrementaron los obstáculos. La razón del aislamiento es que la mayoría de los países de Europa convertidos en campos de batalla, sólo se mantenían algunas comunicaciones gracias a Sherry Mangan, corresponsal extranjero de revistas de la época, y gracias también a la gran abnegación de 150 marineros estadounidenses que consiguieron pasar correspondencia entre distintos países, todos militantes del SWP, sección estadounidense de la IV Internacional.
Según lo señalado en Clave, la revista tenía suscriptores en Chile, Argentina, Perú, Colombia, Cuba, Europa, Estados Unidos y distintos puntos de México. De acuerdo con Broué, quien pudo acceder a la Colección satélite de Octavio Fernández en la Houghton Library, la existencia de Clave contribuyó al surgimiento de la sección boliviana, con José Aguirre, Asbun y Lora, en 1938 nace la sección uruguaya dirigida por Esteban Kichich, presidente del sindicato de metalúrgicos en 1940 -se cree que pudo tener como seudónimo Esteban Vililitch, suscriptor de la revista-; en Panamá, Diógenes de la Rosa recibía la revista, en Puerto Rico, Luis Bergne Ortiz y parece ser que llegaba hasta San José de Costa Rica. Según Broué, no llegó literatura trotskista a Santo Domingo, Haití, Venezuela, Paraguay, Honduras y Nicaragua antes de 1940.
Las organizaciones de la IV Internacional en Latinoamérica no tenían la tradición marxista de los grupos europeos: la mayoría de ellos había surgido a fines de la década de 1920, o a inicios de la de 1930. De alguna manera, participaron de la lucha política en el seno de los Partidos Comunistas de sus países durante y después del VI Congreso de la Internacional Comunista, en 1928. Así, estas fracciones de oposición en Argentina, Brasil, Chile, México, Perú y Cuba fueron expulsadas de los partidos comunistas en distintos momentos. Por otra parte, en Bolivia y Uruguay, los primeros grupos trotskistas parece ser que surgieron ya por fuera del PC.
En el informe a la Conferencia de mayo de 1940, se declara que el movimiento cuartainternacionalista estaba en “en camino de su organización político-organizativa”. Ahí se informa sobre la existencia de grupos en Brasil, Argentina, Chile, Uruguay, Bolivia, Cuba, México y Puerto Rico, y de pequeños núcleos e individuos en Cali (Colombia), Panamá, Perú y otros países de Centroamérica. En algunos casos había dos o tres grupos por país que solicitaban ser admitidos en la IV Internacional, pero todavía no estaban claras las diferencias políticas que existían entre ellos. El departamento latinoamericano (DLA) era el organismo de la IV Internacional encargado de coordinar y ayudar a las secciones de este continente, pero aún era muy débil y estaba golpeado por la crisis del SWP antes mencionada, y por otra crisis, la de la sección francesa. En la conferencia se resolvió fortalecerlo y que brindara más ayuda a los grupos latinoamericanos, en especial al grupo portorriqueño, ya que la isla era, como hoy, una dependencia colonial de Estados Unidos (Trotsky, 2013).
A pesar de las grandes dificultades de la época y de las debilidades de la dirección de la IV Internacional, el hecho de que Trotsky se exiliara en México y decidiera junto a sus colaboradores lanzar la revista Clave contribuyó a impulsar los primeros pasos de los grupos latinoamericanos revolucionarios.
Clave. Tribuna Marxista, una revista de combate revolucionario, de lucha política sin cuartel contra el chovinismo nacionalista que surgió ante la Segunda Guerra Mundial, y contra la política de conciliación de clases (entre la burguesía y la clase trabajadora) del estalinismo, constituye así un inspirador ejemplo de la práctica internacionalista.


Bibliografía

  • Alexander, R. (1973). Trotskysm in Latin America. Stanford: Stanford University Press.
  • Bradu, F. (2012). André Breton en México. México D.F.: Fondo de Cultura Económica.
  • Broué, P. (1982). Le mouvement trotskyste en Amérique Latine. Cahiers Leon Trotsky, núm. 11.
  • Deutscher, I. (1973). Trotsky: el profeta desarmado. México D.F.: Era.
  • Olivia Gall, O. (1986). Octavio Fernández recuerda. Cahiers Leon Trotsky, núm. 26.
  • Oprinari, P. (2009). Trotsky, exiliado político en las tierras de Villa y Zapata. En L. Trotsky. Escritos latino-americanos. Río de Janeiro: Iskra.
  • Trotsky, L. (2013). Escritos latinoamericanos. México-Buenos Aires: Centro de Estudios, Investigaciones y Publicaciones León Trotsky-Museo Casa León Trotsky.